
Con llegada de las bajas temperaturas producto del inicio del otoño, la chinche del arce intenta buscar refugio dentro de los hogares de los chilenos.
Esto ocurre porque, debido al frío, el insecto comienza a hibernar, y se adentra en las casas de, por ejemplo, la Región Metropolitana.
En este sentido, pese a que el bicho no representa un riesgo significativo para las personas, mascotas ni los árboles, sí se considera molesto.
¿Cuál es el origen de la chinche del arce?
Este insecto, conocido científicamente como Boisea trivittata, es originario de América del Norte.
Además, se alimenta, esencialmente, de plantas y árboles como el arce.

En Chile, gracias a sus condiciones ambientales, este tiene el entorno adecuado para que esta especie se desarrolle rápidamente.
¿Cómo llegó a Chile?
Hasta la fecha, no se sabe con certeza cómo esta especie llegó a Chile, aunque sí existen múltiples teorías.
Según indicó T13, se presume que pudo haber sido transportado accidentalmente en algún avión proveniente de Norteamérica, desde donde comenzó su propagación en la Región Metropolitana.
Esto, ya que su primer registro fue en marzo de 2020, específicamente en la comuna de Pudahuel, cerca del Aeropuerto de Santiago.
Pedro Cattan, director del diplomado de Postítulo Internacional en Manejo de Plagas Urbanas de la Universidad de Chile, comentó que "las poblaciones de estos insectos son de difícil control por depredadores porque presentan defensas químicas que repelen los ataques".
"Esto influye en el crecimiento exponencial de ellas. Estos insectos presentan agregaciones muy notables, donde se mezclan adultos y ninfas", agregó.
"Los adultos se aparean y las hembras pueden producir más de 200 huevos en la estación", indicó el experto.
Actualmente, la chinche del arce se expandió por diversas comunas de la Región Metropolitana, como Cerro Navia, Lo Prado, Maipú, Santiago, Las Condes, Providencia y Ñuñoa.