Metallica es una de las bandas más populares del vasto ambiente del metal. Sus canciones han sabido llegar a fanáticos de todo el mundo y de todas las generaciones.
A pesar de su fanaticada fiel que acompaña a James Hetfield y compañía en sus multitudinarias giras, muchas veces los lanzamientos de Metallica descolocan a parte de sus seguidores, que no comulgan con la experimentación de la banda orientada a seguir sonidos que difieren de su característico trash metal.
Lars Ulrich, baterista de la banda se refirió a aspectos cómo la estética que la banda comenzó a utilizar en la segunda mitad de los 90' según sus palabras, afectó la recepción de uno de los álbumes de Metallica.
El álbum afectado por el estilo
Según reporta el sitio Far Out Magazine, Lars Ulrich se refirió a la perspectiva que tiene por el álbum Load. El baterista consideró que la decisión de realizar cambios estéticos (peinado, maquillaje y actitud) como un desvío que afecto el desempeño comercial de ambos trabajos.
El músico recordó como la gente le reconoció no valorar el disco en gran parte debido al cambio de imagen que Metallica adoptó. "Recuerdo que a medida que avanzaba el ciclo del álbum Load, cada vez había más gente que se me acercaba y me decía que nunca le habían dado una oportunidad al álbum debido a cómo se les había presentado", comentó .
"Eso me hace preguntarme cómo habría sido Load si no hubiéramos hecho lo del peinado, el maquillaje y el álbum con la portada de Pushead” añadió el baterista.
El 'saco de boxeo' de los fanáticos de Metallica
Tras el lanzamiento de Load por primera vez a Metallica se le calificó de 'vendida' por parte de sus seguidores originales. Algo que se repetiría más adelante cuando los de San Francisco lanzaron St. Anger (2003).
Lars Ulrich consideró que aquellos trabajos lanzados a fines del siglo pasado han sido un 'saco de boxeo de Metallica para los fans'. Sin embargo, defendió el trabajo de la agrupación: “Era todo lo que queríamos hacer… ¡así que a la mierda!”, sentenció el baterista.