Una de las directoras de cine con mayor reconocimiento en Chile es Maite Alberdi. Recientemente, se estrenó a través de streaming El Lugar de la Otra, la primera ficción de la chilena, que nos presenta una historia basada en hechos reales.
Pero eso no es todo, el crimen en el que está inspirada la cinta protagonizada por Elisa Zulueta y Francisca Lewin, se concretó con similitudes a otro anterior, cometido por una reconocida escritora chilena.
La historia se ambienta en el año 1955, fecha en la que la escritora María Carolina Geel asesinó a su pareja a vista de todos en el hotel Crillón, ubicado en el centro de la capital. En la película, Mercedes, interpretada por Elisa Zulueta, trabaja en el caso, con el tiempo, anhela la libertad y visión de vida de la condenada a prisión.
Si viste la película de Maite Alberdi, seguro quedaste con ganas de descubrir la historia real y las motivaciones de la escritora para disparar a su pareja. En caso de que no hayas tenido tiempo, este relato seguramente te motivará a observarla.
El crimen de María Carolina Geel y similitudes con uno anterior
Georgina Elena Silva Jiménez, más conocida como María Carolina Geel, fue una escritora chilena que alcanzó su mayor grado de popularidad tras el libro que sacó luego de asesinar a su novio en el hotel Crillón en 1955.
Después de tomar desayuno con Roberto Pumarino, la escritora sacó un arma y le disparó, provocándole la muerte instantánea. Debido a que la mujer nunca confesó los motivos del crimen, fue enviada a la cárcel. Sin embargo, no cumplió toda su condena, pues fue indultada por el presidente Carlos Ibañez del Campo, tras la petición de Gabriela Mistral.
El crimen de la escritora se parece bastante a uno cometido por una colega de rubro, pero ejecutado 14 años antes. En 1941, la escritora María Luisa Bombal, disparó en contra de su ex pareja, precisamente a las afueras del hotel Crillón. ¿La razón? Este no le contestaba las cartas y tenía una nueva relación. Cabe destacar que tuvieron una historia años antes, no en un tiempo cercano al crimen.
A diferencia del caso de María Carolina Geel, la creadora de La amortajada solo hirió al involucrado con un disparo en el hombro. Aquello la llevó a una sentencia en la cárcel, que se vio interrumpida cuando el herido la liberó del crimen.