Hace unas horas supimos de parte de su familia que, lamentablemente, la reconocida actriz británica Maggie Smith murió a los 89 años de edad.
La vimos brillar en dos de sus personajes más recordados. Con su magia como la profesora Minerva McGonagall en la saga de Harry Potter, y su fineza como Violet, Condesa viuda de Grantham en la serie Downton Abbey. Sin embargo, Maggie ya era toda una estrella del cine desde mucho antes que sus icónicos papeles.
El triste anuncio que conmovió a los fanáticos del cine
El deceso de la querida actriz Maggie Smith fue confirmado por sus hijos Toby Stephens y Chris Larkin a través de un comunicado de prensa. "Con gran tristeza tenemos que anunciar la muerte de Dame Maggie Smith. Falleció pacíficamente en el hospital esta madrugada, viernes 27 de septiembre", dictó el anuncio.
Dame Maggie Smith died in hospital on Friday, her sons Chris Larkin and Toby Stephens said in a statement pic.twitter.com/4A8DXyPkKv
— The Telegraph (@Telegraph) September 27, 2024
La familia también expresó su agradecimiento al personal del Hospital Chelsea and Westminster, donde falleció pacíficamente, según cuentan sus hijos. La causa de su muerte no se específico, pues, tal como recalcan sus hijos, Smith siempre fue una persona muy reservada con su vida privada.
"Deja dos hijos y cinco nietos cariñosos que están devastados por la pérdida de su extraordinaria madre y abuela", concluyeron en su comunicado.
Maggie Smith en sus inicios al estrellato
Smith comenzó su carrera mucho antes de ser reconocida como la querida profesora en Harry Potter y la Piedra Filosofal. Después de unos años en teatro y papeles menores en televisión, la actriz debutó en el cine a sus 22 años, en la película de 1958 Nowhere To Go, interpretando a Bridget Howard. A partir de allí, comenzó a ser notada por la industria cinematográfica.
En 1965, con la adaptación al cine de la obra de Shakespeare, Othello, la actriz comenzó a recibir más reconocimiento por su desempeño, recibiendo su primera nominación a los Premios Oscar por su papel como Desdémona.
Finalmente, su protagónico en The Prime of Miss Jean Brodie (1969) la consagraría como la promesa inglesa de la actuación. Su papel de la profesora Jean Brodie le otorgó el ansiado Oscar como Mejor Actriz, aunque no pudo aceptarlo de manera presencial.
Y no sería el único para Maggie Smith. En 1978, se repetiría el plato como Mejor Actriz con la película California Suite, interpretando a Diana Barrie. En esa ocasión, la actriz sí pudo asistir al evento a recibir su merecido premio, donde agradeció a sus compañeros de set y al director, Herbet Ross, por creer en su trabajo.
Maggie Smith, sin duda, deja atrás un fuerte legado en la actuación. Sus interpretaciones quedarán en el corazón de todos los fans ya que, si no fuera por su increíble carisma y profesionalismo, sus personajes no serían considerados así de icónicos como los son actualmente.