La OMS (Organización Mundial de La Salud) acaba de identificar lo que sería el siguiente producto de uso cotidiano que representa una amenaza para la salud al elevar el riesgo de cáncer. Esto levanta varias alarmas, sobre todo porque es uno de los más populares.
Esto ha hecho que la preocupaciones de muchos aumenten. Porque luego del descubrimiento, la organización posicionó a esto en una de las categorías mas altas con respecto al riesgo que representa.
¿Cuál es el producto cancerígeno según la OMS?
La Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC) de la OMS luego de una serie de estudios pudo llegar a reveladoras conclusiones. Estas ubicaban a ni más ni menos que al talco como un potencial causante de cáncer en las personas.
Este popular producto de origen mineral es usado principalmente en la industria cosmética. Y se ubicó en el grupo 2A, el cual es el segundo de mayor gravedad dentro de la pirámide de identificación. Posicionándose como "probablemente cancerígeno para los humanos", aumentando sobre todo la posibilidad de generar cáncer de ovario.
“La clasificación del Grupo 2A es el segundo nivel más alto de certeza de que una sustancia puede causar cáncer. Hubo numerosos estudios que mostraron consistentemente un aumento en la incidencia de cáncer de ovario en humanos que informaron el uso de talcos corporales en la región perineal” indicó la IARC. “Sin embargo, no se pudo excluir la confusión por la exposición simultánea al asbesto, y el aumento de la tasa se basó en un pequeño número de cánceres de ovario en esos estudios ocupacionales” añadieron.
Sin embargo, el medio El País conversó con el oncólogo del Hospital Clínico de Valencia, Alejandro Pérez Fidalgo. Este se refirió al riesgo que representa el uso de talco en las personas y las conclusiones a las que se había llegado. “Eso no significa que, porque alguien se haya puesto talco alguna vez o incluso que porque lo use con cierta regularidad, esté claramente en riesgo, ya que el riesgo de generar un cáncer va a depender de dosis de exposición, tiempo y forma de contacto con el talco. Los estudios que sustentan esta clasificación tienen muchos sesgos, es decir, ciertos factores de confusión que nos impiden apreciar o predecir con total solidez la relación del uso del talco o la exposición al mismo con el cáncer”