No se puede negar que por lo hecho con Dire Straits, Mark Knopfler entró en la historia popular del rock.
Desde que junto a sus colegas inició su carrera musical, le tocó lidiar con la fama y el éxito.
Este reconocido grupo, la rompió en la década de los 80', vendiendo millones de discos y siendo muy reproducido en las radios.
"Walk of Life", "Sultans of Swing" y "Money For Nothing", son solo algunos de sus mayores himnos, que deslumbraron tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo.
Mark, quien fue el líder de la agrupación, se mantuvo muy activo, luego de que este se disolviera. Incluso quiso reconocer hace no mucho que no se siente un músico excepcional; sino que paso a paso va adquiriendo más cosas.
Un sentimiento que Mark Knopfler explica personalmente
Normalmente en artistas de la talla de este guitarrista y cantante, se da que la arrogancia y el ego, juegan papeles fundamentales en sus personalidades.
No obstante, en Mark Knopfler esto no ocurrió, puesto que él mismo cree que no es un guitarrista, compositor y cantante excepcional.
Esto simplemente, porque le cuesta asumir de alguna manera sus capacidades que son catalogadas como muy buenas.
"Sigo sin considerarme cantante en absoluto. Tardé mucho tiempo en considerarme guitarrista. Y luego como compositor, eso me llevó un tiempo. Y cantante, eso ni siquiera contaba para mí", confesó.
Aún teniendo esta falta de confianza en sus cualidades, logró tener mucho éxito, siendo admirado en varias partes del mundo.
Además de esto, según el medio Rock FM, este intérprete dijo estar muy ligado a otros exponentes como Bob Dylan y Frank Sinatra, siendo muy significativos en su visión artística.
"Creo que Bob Dylan fue inspirador en el sentido de que te dabas cuenta de que no tenías que ser un clásico -ya sabes, por mucho que me guste la música y adore a Frank Sinatra y todo eso, los cantantes, me di cuenta de que en la música folk ocurría algo más", concluyó.