Dentro del mundo del metal, Lars Ulrich suena como uno de los nombres más conocidos.
Su importancia para que Metallica sea lo que es hoy en día, se debe a su ingenio y gran aporte.
Puede que desde siempre, haya sido criticado por varas personas acerca de su forma de tocar la batería. Pero lo cierto es que logró forjar su propio sello, como uno de los artistas más famosos de la historia.
No obstante, el mismo recalca que cómo muchas cosas, no todo es tan fácil cómo parece, sobre todo en algo tan difícil como tocar en uno de los grupos más grandes que existen.
Para ello, él mismo reveló que ha trabajado duro, sobre todo a día de hoy, para sobrellevar las nuevas giras que tiene el grupo.
La constancia que sigue en Lars Ulrich
La práctica hace al maestro y Lars lo sabe muy bien, ya que con el pasar de los años, se supo pulir de manera notoria.
Si bien varios fans, opinaban que simplemente este personaje no iba en conjunto con el género, lo cierto es que llegó a darle un sonido distintivo a Metallica.
Es este el objetivo que llevó a la cima a los mejores artistas en la industria musical, quienes sintieron en el constante ritmo de querer mejorar, una ayuda inigualable.
Según corroboró Mariskal Rock, fue el productor Greg Fidelman, quien expuso el presente del batero en la gira de su banda. Algo que realmente le exigía llevar sus habilidades, a un nivel más potente. Donde obviamente el baterista se siente muy apoyado a la hora de buscar a alguien que lo impulse en sus acciones.
"No creo que busca que lo empujen. Pero esta gira es un reto a su manera, en especial para él y sus cuatro baterías. El hecho de tener la edad que tiene, lo ha inspirado a trabajar más duro porque no es algo tan automático", explicó Fidelman.
Dado a esto, muchos sienten una mejoría en lo que Lars sabe hacer, destacando mucho su perseverancia al asunto.
