El fenómeno de Taylor Swift es digno de estudio, tanto que hay cursos que lo estudian, y uno de ellos es dictado por Alejandro Martínez, profesor del departamento de Literatura de la Facultad de Artes Liberales de la Universidad Adolfo Ibáñez.
El académico desarrolla una cátedra destinada a analizar las canciones de Taylor Swift que se desde hoy 9 de noviembre hasta el sábado 11 estará en Buenos Aires en el Estadio Monumental de River. Y hoy, vino a Un País Generoso para explicar de dónde salió este fenómeno.
"Yo empecé a escuchar a Taylor Swift alrededor del 2010" dijo Sepúlveda. "Pero no fue hasta la pandemia cuando ella lanza su disco folklore (2020) que empecé a interesarme en el trabajo que hace con sus letras, sus canciones y empecé a conocer más sobre el fenómeno".
En la conversación, el profesor explicó que lo de Taylor Swift, "es un fenómeno que va más allá de la letra o escuchar una música, es más bien una experiencia lo que ofrece Taylor Swift, una experiencia de comunidad y afecto. Hemos visto una gran cantidad de chilenos y chilenas que cruzaron la cordillera para ir al concierto. Muchas de estas personas que se van en grupo, ni se conocían antes de ir".
Sin embargo, "Es interesante cómo se ha expandido más allá de sentarse a escuchar una canción y creo que eso es lo complicado de este fenómeno, que no aparece de un día a otro, que se ha construido con el tiempo".
¿Qué diferencia a Taylor Swift de otros artistas?
Le preguntamos sobre qué hace que especial a Taylor Swift como fenómeno, en comparación con otros artistas gigantes. "Mi experiencia es más distante, desde la mirada de un profesor analizando las canciones" reconoce el profesor. "Pero en mis estudiantes veo la capacidad de empatizar de identificarse con las canciones".
Además, destaca que "cada disco es muy distinto en lo del género y el estilo, y el abordaje de distintos temas como el amor" por lo que aunque no te guste en general, puede hacer más fácil identificarse.
"Esa capacidad de renovarse ha permitido también que distintas generaciones en distintas partes del mundo se identifiquen con su música". En especial porque "ella empezó en el country. Su entrada al pop fue muy posterior en su carrera" pero ganó bastante experiencia.
Pero, el fenómeno social se mantiene en gran parte por los fans. "Algo muy interesante es como esto de las pulseras, que son cosas que se inventaron los propios fans para construir estas comunidades. Aunque viene de una canción, no sabemos quién habrá sido la primera persona que se le ocurrió que esto tenía que ser parte de las experiencias del concierto".
"Toda la preparación del concierto viene de meses atrás. Tenemos la gente que acampa, hace las pulseras, la gente que fue al cine, muchas etapas antes de verlo en Buenos Aires" señala.