El aclamado director Quentin Tarantino siempre hace noticia sobre sus opiniones sobre el cine, y ahora se supo de una película quizá no muchos se esperaban de la que fuera fan.
Se trata de "Un Viernes de Locos", película de 2003 protagonizada por Lindsay Lohan y Jamie Lee Curtis. El filme cuenta la historia de una madre y una hija que se ven obligadas a vivir la vida de la otra después de despertarse en cuerpos opuestos. Este filme es nueva versión de la película de 1976 del mismo nombre del director Gary Nelson.
La versión contemporánea de Freaky Friday es una especie de clásico de culto, que tuvo un gran éxito en su lanzamiento en DVD y VHS después de su estreno en cines.
Quentin Tarantino es fan de "Un Viernes de Locos"
Una de las escenas más memorables de la comedia ve al personaje de Lindsay Lohan interpretar la canción "Take Me Away" con su banda ficticia Pink Slip en una batalla de bandas. La escena filmada en House of Blues en Hollywood representa el clímax de la película.
En una conversación en torno a "Un Viernes de Locos", con The Hollywood Reporter de la película por el 20 aniversario, el director Mark Waters reveló que Quentin Tarantino es fan. Además reflexionó sobre la memorable escena que le encantó al director de Kill Bill.
En la entrevista el director explicó: "Me encanta la secuencia de House of Blues solo porque era una especie de gran momento en mi mente, construyendo a esto que propuse sobre la Batalla de las Bandas. Había mucha gente, muchas partes móviles y hacer que todo se uniera como lo hizo fue genial" dijo Waters.
"Una vez me acorraló en una fiesta Quentin Tarantino, quien me describió con gran detalle plano a plano esa secuencia de House of Blues. Estaba como describiendo por qué era una escena genial y un final perfecto para la película. Y yo dije: “Esto es genial, hombre. Quentin Tarantino estaba actuando como fanático mío".
