Kurt Cobain no era conocido como una persona particularmente violenta, sin embargo, hubo una vez en que perdió la paciencia con dos escritoras a quien amenazó. Se trata de Victoria Clarke y Britt Collins, un dúo de escritoras británicas que fueron intimidadas por el cantante de Nirvana, e incluso quedó todo grabado.
Originalmente, Clarke y Collins habíanse habían acercado a la banda para escribir un libro con su versión del ascenso del trío al estrellato. Todo iba bien, loe ejecutivos le dieron luz verde e incluso pudieron salir de gira con la banda mientras tocaban por Europa en 1992. Pero entonces las cosas empezaron a salir mal.
A Clarke se le dijo que abandonara la gira después de pedirle una entrevista a Courtney Love, algo que, según le informaron, enfureció mucho a Kurt Cobain.
El problema era que Cobain y Love estaban cada vez más molestos por lo que estaban investigando Clarke y Collins: entrevistar a los exnovios de Love, por ejemplo. Y, de manera más provocativa, hablar con la escritora de Vanity Fair, Lynn Hirschberg. Para los Cobain, esto fue un acto de guerra. Esto ya que Hirschberg había escrito previamente un artículo que daba entender que Courtney había tomado heroína mientras estaba embarazada, algo que podría haber resultado en que les quitaran a su bebé.
Las amenazas de Kurt Cobain
Cobain y Love comenzaron a especular salvajemente sobre lo que iba a estar en este libro. Clarke estaba enferma en su casa cuando Courtney Love la llamó y le dejó un mensaje que se puede resumir con la bienvenida introductoria: "Usaremos cada dólar que tenemos y todo nuestro poder para joderte".
Como se escucha en el video, su voz se volvió más somnolienta y preocupante después de una serie de llamadas. Pero el tono de sus palabras seguía igual de amenazante y extraña para la imagen que se tiene actualmente de Kurt Cobain.
“Tengo muchas cosas que decirles, pequeñas parásitos”, comenzaba el primer mensaje. “Si sale algo en este libro que lastima a mi esposa, las lastimaré a ustedes. No me importa si este es un mensaje grabado, estoy al final de mis cuerdas..."
"Supongo que podría gastar unos cuantos miles de dólares para que te apaguen, pero tal vez primero lo intente de la manera legal".
El mensaje tres decía: "En este punto, probablemente sepas que me importa un carajo si tienes esto grabado o si lo usas en un tribunal de justicia..."
Al final, fue la ruta legal lo que terminaron con el proyecto de Clarke y Collins. Aparentemente, los managers de Nirvana presentó una demanda para evitar que su libro saliera a la luz hasta el sol de hoy.