En la última década, Ari Aster se ha consolidado como uno de los directores de terror más importantes de su generación. Con películas como Hereditary y Midsommar, se ha posicionado como uno de los mayores referentes del terror actual y del arte de incomodar al público.
Sin embargo, nunca había sido tan claro su objetivo de hace enojar a la audiencia, como con su nueva película, Beau Is Afraid. Y es que, su tercer filme probablemente se convierte en la película más odiada del año. Algo que, en este caso, es algo bueno.
¿Qué es Beau Is Afraid?
Beau is Afraid es la tercera película de Ari Aster, aclamado director conocido por clásicos modernos del terror como Hereditary y Midsommar. Aunque el horror sigue siendo parte de esta historia, es mucho más difícil de definir que sus anteriores entregas.
La película cuenta la historia de Beau (Joaquin Phoenix), un hombre de mediana edad que está completamente aterrado de todo lo que lo rodea. Especialmente, aterrado de la idea de ir a ver a su madre, quien lo crio después de la misteriosa muerte de su padre cuando él fue concebido.
Descrita como una épica odisea sobre uno de los mayores perdedores del cine, la película es un viaje de tres horas hecha para inducir la ansiedad, volar tu cabeza y, en parte, hacer que el público salgo odiando el cine.
Beau Is Afraid no es para nada una película tradicional, sino que una completa deconstrucción del cine y las historias de terror. Con giros sorpresivos y decisiones estilísticas hechas con el claro objetivo de hacer enojar al público, mientras Ari Aster disfruta como el sádico que es.
El equipo detrás de Beau Is Afraid
Ari Aster ya es un importante nombre para motivar al público a ver Beau Is Afraid. Sin embargo, todo su equipo está lleno de estrellas. La película está protagonizada por Joaquin Pheonix, quien da una de sus interpretaciones más desquiciadas a la fecha. Patti LuPone, Amy Ryan, Nathan Lane, Denis Ménochet, Parker Posey y Stephen McKinley Henderson son parte del elenco.
La fotografía está a cargo de Pawel Pogorzelski, quien ya trabajó en Hereditary y Midsommar. Mientras que la música está a cargo del productor de electrónica, The Haxan Cloak. Su estudio de distribución es A24, quien este año arrasó en los Oscar con Everything Everywhere All At Once y The Whale.
Pánico colectivo, crisis de identidad y mommy issues
Son múltiples las temáticas que Beau Is Afraid trata en su historia. La central ya se nos adelanta con su título: El terror. Esta vez no es el terror de fantasmas o de la otredad, es el miedo a la misma sociedad violenta y el caos en el que vivimos.
Joaquin Phoenix hace un increíble trabajo en retratar el miedo que puede provocar una sociedad que parece estar contra tuyo, incluso si la historia parece tratar su psicosis como algo que solo pasa en su cabeza.
¿Cuál es el mayor producto de su miedo? Su extraña relación con su madre. Aunque Ari Aster afirma que sus padres lo apoyan completamente, es claro que las relaciones tóxicas en la familia son parte de su inspiración. Esta versión distópica del cuento de Edipo analiza los traumas que cargamos desde niños, sin saber que también lastimamos a nuestro padres.
La cinta también analiza la identidad y el miedo de quedarse estático ante un mundo que avanza. En una espectacular secuencia a cargo de los directores chilenos, Cristóbal León y Joaquín Cociña, tenemos toda una fábula que te dejará pensando por días y días.
El cine hecho para hacerte enojar
Ari Aster no es tímido en confesar su pasión por incomodar al público. En 2011 estrenó su proyecto de tesis, The Strange Thing About the Johnsons, un perturbador corto sobre el incesto, que él mismo confesó haber hecho para saber cuánto podría perturbar a la gente.
Ahora, imagina si a una mente como esa le das $35 millones de dólares, completa libertad creativa y un Joaquin Phoenix disputo a hacer todo lo que él le diga. El resultado será una de las odiseas más épicas, confusas y provocadoras del cine contemporáneo.
Durante sus tres horas de duración, compuestas de tres actos y un interludio, Beau Is Afraid te tira una imagen provocativa tras otra, con el objetivo de hacerte cuestionar todo lo que esperabas ver. Aunque creas imaginar lo que va a pasar a continuación, la promesa es que no será así.
Su "héroe" es un completo perdedor, cada una de sus acciones es más idiota que la otra, las visuales rápidamente te desesperan. Su banda sonora te hará querer salir corriendo, los personajes te incomodarán a más no poder y las revelaciones te harán querer gritar, "¡¿qué m*erda está pasando?!", cada segundo.
Beau Is Afraid es el experimento de Ari Aster para ver cuánto puede su público soportar antes de tener una crisis de pánico en plena sala. Una experimentación de la narrativa que goza con causar angustia y hacer enojar a las personas.
Después de todo, qué puede retratar mejor el mundo actual que una película que busca causar las reacciones más extremas. Ari Aster no está realmente interesado en que te guste su película, le basta con que te cause algo, aunque eso sea el odio más profundo por el cine.
