Dentro de las canciones más populares de 2021, está Déjà Vu de Olivia Rodrigo, con la cual muchos se identifican tras la idea de (según asegura la artista en la letra) romper una relación con alguien, verlos juntarse con alguien más, y darse cuenta de que viven la vida que tú viviste, este tipo de paramnesia se define como el reconocimiento de alguna experiencia que se siente como si se hubiera vivido antes, y la verdad es que tiene una explicación científica.
La explicación científica que se les da a los denominados Déjà Vu
Según reporta Perfil (vía BioBio Chile), "la sensación del dejá vu es en realidad el resultado de una comparación instantánea que hace el cerebro entre una experiencia anterior y la que se produce en el momento presente". Y que se detona debido "a la similitud de la disposición espacial de muebles, objetos y personas".
Anne Cleary, de la Universidad de Estado de Colorado en los Estados Unidos, quien hizo un reciente trabajo sobre el tema, dijo lo siguiente. “Todavía no sabemos todo sobre el déjà vu, pero la similitud de la distribución espacial entre las dos situaciones, la pasada y la presente, contribuye a que surja”.
El estudio publicado en The Conversation, consistió en un grupo de personas que se sometieron a un experimento. “Mi equipo usó la realidad virtual para ubicar a las personas dentro de las escenas”.
“De esa manera, podíamos manipular los entornos en los que se encontraban las personas: algunas escenas compartían el mismo diseño espacial y, por lo demás, eran distintas. Como se predijo, era más probable que ocurriera un déjà vu cuando las personas estaban en una escena que contenía la misma disposición espacial de elementos que una escena anterior que vieron, pero no recordaron”. Agregó.
De acuerdo al medio, por lo general las personas tienen impresiones de que estuvieron en ciertos lugares alguna vez, pero esto sería una ilusión. Debido a que el cerebro es capaz de "recuperar las sensaciones que tenía almacenadas de alguna otra ocasión en la que esa misma persona estuvo en un sitio donde las mesas, las sillas y las personas del entorno se ubicaban en posiciones similares".
De esa forma, los datos espaciales capturados por el cerebro se entrelazan con los datos sensoriales y pueden llegar a activarse.
