El reconocido cantautor norteamericano extendió sus disculpas a los fanáticos que compraron la edición firmada de su libro.
La controversia ocurrió luego de que la editorial pusiera a la venta una edición firmada del nuevo libro de Dylan, "La filosofía de la canción moderna". Esta versión especial tenía tan solo 900 ejemplares a disposición de los compradores, por un valor de 600 dólares estadounidenses.
La editorial incluyó en el libro una carta de autenticidad para validar la firma, pero cuando los compradores compararon los autógrafos se dieron cuenta de que eran idénticos. ¿La razón? Los libros no los firmó el cantante, sino una máquina.
Las disculpas de Bob Dylan
En respuesta a la polémica, el cantautor de 81 años emitió un comunicado público en el que afirmó que él había firmado todas sus obras, antes de este libro, según recuenta The Guardian.
"No obstante, en 2019 tuve un mal caso de vértigo y continuó durante los años de la pandemia", explicó Dylan. "Toma un equipo de cinco trabajando en proximidad conmigo para poder realizar estas sesiones de firma, y no pudimos encontrar una manera segura y trabajable de completar lo que necesitaba hacer mientras el virus era agudo".
"Así que", continuó Dylan, "era imposible firmar cualquier cosa y el vértido no ayudó. Con los plazos de contrato acercándose, la idea de usar un auto-lápiz fue sugerida, junto con la afirmación de que este tipo de cosa se hace 'todo el tiempo' en el mundo del arte y la literatura".
"Usar una máquina fue un error de jucio y quiero rectificarlo inmediatamente. Estoy trabajando con Simon & Schuster y mis partners de galería para hacer precisamente eso", afirmó el cantautor.
¿Qué dijo la editorial?
Simon & Schuster también se refirió a la polémica, y precisaron en Twitter: "Como resulta, los libros de edición limitada sí contienen la firma original de Bob, pero en una forma de réplica escrita".
— Simon & Schuster (@simonschuster) November 20, 2022
Como medida de reparación a las personas afectadas por esta compra, la editorial ofreció una devolución a los fanáticos, bajo la condición de que también devuelvan el certificado de autenticidad. Este último será reemplazado por un certificado que ratificará que se trata de una firma automática, según detalla The Guardian.