Finalmente se lanzó I'm Glad My Mom Died, el esperado libro biográfico de Jennette McCurdy, la ex actriz adolescente conocida por su papel en iCarly. Las redes ya están explotando luego de leer la biografía de la interprete de 30 años, siendo todo un fenómeno de ventas.
Y es que solo con su nombre causó controversia: Me alegra que mi mamá haya muerto. Esto, debido a todos los abusos que sufrió por parte de la industria, productores de Nickelodean y, en especial, su compleja y tóxica relación con su madre.
Las revelaciones más impactantes del libro de Jennette McCurdy
La tóxica relación con su madre
Tal como lo adelanta el nombre, gran parte del libro de Jennette McCurdy detalla su compleja relación con su madre, Debra. Según revela, su mamá fue una actriz frustrada que jamás logró alcanzar el éxito y forzó a su hija para conseguir los sueños que ella no logró, obligándola a ser parte de la industria.
"¿Quiéres ser la pequeña actriz de mami?", habría sido la constante frase que marcó su niñez. Sin embargo, sus intentos estuvieron llenos de abusos, con manipulación y maltrato psicológico que la causó un fuerte trauma que reconoció solo años después.
Sufrió abuso físico por parte de su mamá
Los abusos de la madre no fueron solo psicológicos. En su libro, Jennete McCurdy revela que su madre solía "limpiar su trasero" hasta que tenía ocho años, teniendo poder sobre su cuerpo. Además, le hacía constantes chequeos en sus senos y traserero, para buscar "imperfecciones".
Asimismo, señala que Debra seguía bañando a su hermano hasta que este tuvo 16 años. Cuando él pedía bañarse solo, ella se ponía a llorar y señalaba que no quería que su hijo "creciera tan rápido", otras de las manipulaciones que acusa la actriz de iCarly.
Esto le provocó un trastorno alimenticio
Debido al traume que sufrió en su niñez, y la constante presión por parte de su madre, Jennette McCurdy desarrolló un desorden alimenticio cuando era solo una niña. "Cada domingo, me pesaba y medía mis muslos. Después de semanas de rutina, me daba libros de dieta que debía terminar rápido", señala en su libro.
No la dejaron renunciar
Tras fallidos intentos por alcanzar la fama, Jennette McCurdy confiesa que quería renunciar a la actuación. Sin embargo, esto molestó a su madre y la manipuló una vez más para que lo siguiera intentando, pese a que jamás quizo hacerlo.
"'No seas tonta, te encanta actuar. Es tu cosa favorita en el mundo', decía mamá con un tono que sonaba como amenaza", continúa Jennette McCurdy en su revelador libro.
Acusa que fue explotada por la industria
En su relato, Jennette McCurdy acusa que los abusos no eran solo de su madre, sino que también por parte de la industria. Sin nombrarlo, la actriz introduce al "Creador", señalando que este la explotaba y buscaba sexualizarla cuando era solo una adolescente.
Entre las instancias que recuerda, señala que el "Creador" la obligó a utilizar un bikini en vez de otro traje de baño más reservado, a que tuviera su primer beso frente a la cámara y la obligó a tomar alcohol cuando era menor de edad.
Intentaron sobornarla
Según revela Jennette McCurdy, los ejecutivos de Nickelodeon intentaron sobornarla para que no pusiera estas acusaciones en su libro. Al parecer, le ofrecieron $300 mil dólares para que guardara silencio y jamás compartiera su historia.
Sin embargo, la actriz lo rechazó y se mantuvo fiel a sus experiencias y la importancia de contarlas. En especial, estos intentaron callar una acusación de acoso sexual por parte de uno de los productores, algo que se estaría investigando.
El impacto de la muerte de su madre
Aunque lleva el libro lleva el nombre de Me alegra que mi madre haya muerto, esto no fue nada sencillo para Jennette McCurdy en el inicio. Tras su partida, a causa del cáncer, volvió a caer en un desorden alimenticio.
Sin embargo, gracias a la terapia, señala que pudo llegar a un lugar más estable, aunque es un camino duro que continúa recorriendo. "Es la clase de dificultades en las que tomó mucho orgullo", confiesa la actriz.