Este 21 de julio llega nuevamente un fenómeno astronómico, que poco a poco va adquiriendo relevancia y cada vez es más frecuente.
Es definitivo que nuestro planeta vive hoy por hoy acelerados cambios que nos afectan directa o indirectamente. Ya lo estamos viendo con la ola de calor que azota Europa o los frentes polares que nos han afectado durante las últimas semanas en nuestro país. Sin embargo, estos cambios no solo se están desarrollando dentro de este, si no que también ahora afectan desde el espacio exterior.
El pasado 11 de julio hubo un fenómeno que alertó a expertos, astrónomos y radioaficionados. ¿Por qué se preguntarán ustedes? bien, las transmisiones radiales de parte de las costas del Océano Pacífico tuvieron interrupciones frecuentes. ¿Lo que pasó? una llamarada solar llegó hacia la Tierra.
¿Qué es una llamarada solar?
En palabras simples, el inusual fenómeno proviene desde la superficie del sol y se trata de emisiones electromagnéticas que pueden afectar la atmosfera y al planeta interrumpiendo comunicaciones.
Según indican expertos, estos fenómenos se dan luego de procesos mucho más elaborados y no ocurren de manera espontánea. De hecho, indican que es probable que ahora, el sol esté experimentando uno de estos.
SPECTACULAR FILAMENT ERUPTION: A filament stretching halfway across the solar disk became unstable and erupted away from the Sun. Couple things to note: (1) A section of it twists (magnetic energy being released). (2) After the event two bright ribbons form - a two-ribbon flare! pic.twitter.com/d3GN6S5Dpy
— Keith Strong (@drkstrong) July 16, 2022
Indicaron también, que lo vivido el pasado 11 de julio, pero percibido cuatro días después, se trató de una eyección de masa coronal. Esta se caracteriza por viajar a menor velocidad, por lo mismo se apreció el 15 de este mes. Y corresponde a una enorme cantidad de plasma solar eyectada hacia el exterior del astro y lanzada hacia el espacio.
Según informes, el sol presentó inusuales actividades hasta la semana pasada. Por lo mismo se prevé que hoy (21 de julio), la llamarada alcance el planeta.
¿Cómo nos afecta?
Entes especializados y encargados de prevenir este tipo de fenómenos- como la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos-, ya han puesto en alerta a sus equipos de observación y climáticos. Sin embargo, hacen un llamado a no alarmar a la población.
Todo esto, porque aún no se comprueba que las llamaradas solares afecten la salud de las personas. De todas formas, si advierten que las telecomunicaciones pueden sufrir algún inconveniente durante el día.
Los casos más extremos que podrían ocurrir, según advierten los expertos, es que se produzcan cortes de luz y perturbaciones en las señales de radio y satélites. No obstante, no suponen un peligro de gran tamaño para la población y se hace un llamado a la calma. A realizar las actividades diarias con total normalidad.