Despertar, sentirse un poco agotado y con la nariz tapada, ver si tenemos gusto, sentirse medianamente aliviado pero con el temor siempre presente, y repetir todos los días. Esos son los nuevos protocolos que seguimos diariamente, a veces de manera inconsciente. Es que los síntomas de Ómicron, sobre todo en vacunados podrían ser más comunes de lo que pensamos.
¿Cuáles son los síntomas de ómicron?
Desde que se descubrió la nueva variante ómicron, respiramos aún con más cautela para no presentar síntomas. A pesar de la mortalidad relativamente que baja que demuestra, los expertos han sido enfáticos que un aumento de casos, por la gran tasa de infección que presenta, podría ser incluso igual o más grave que olas anteriores.
Para personas sin vacuna esto puede ser una enfermedad grave con mayor probabilidad que para la gente con su esquema completo de inoculación. La infección obviamente se puede dar en ambos casos, pero en el primero lo síntomas de ómicron pueden ser detectables por lo siguiente: Dolor de cabeza, garganta y muscular. Además, fiebre, escurrimiento nasal, tos y estornudos.
BA.2: Más contagiosa
En este momento, el país presenta casos de la nueva cepa de la variante ómicron, cuyos síntomas serían los mismos. La BA.2 está en la mirada del mundo por ser la más contagiosa entre las subvariantes. Los casos del 27 de febrero marcaron una cifra que se niega a decrecer: Casi 24 mil casos y una positividad de un 21%. A pesar de todo, los números se han mantenido relativamente estables.
Hasta la fecha son 42.200 las personas en nuestro país que han perdido la vida por esta enfermedad. El llamado, como siempre, es al autocuidado y a la responsabilidad sanitaria. Hoy más que nunca es necesario tener el plan de vacunación completo, con miras a que si llegásemos a contagiarnos, nuestro cuerpo pueda resistirlo sin mayores complicaciones.
