Varias veces ha sido Chile el nominado a los premios Oscar. Ya sea en la categoría de cortometrajes o en la de películas internacionales, casi siempre sorprende con alguna que otra nominación.
Este año fue el turno de "Bestia" el cortometraje de animación sobre la historia de Íngrid Olderöck, la exagente de la Dina conocida como “la mujer de los perros”. Pero conocida porque cometió vejámenes en centros de tortura durante la dictadura de Pinochet.
La animación chilena vuelve con una apuesta fuerte. Está dentro del mismo reconocimiento que ganó en 2016 Historia de un oso, la primera producción chilena en obtener la estatuilla dorada. Esta vez lo hace con una obra que adopta la forma de un thriller psicológico, está orientado al público adulto y cuenta con influencias del cine de Roman Polanski y Lars von Trier.
El creador es Hugo Covarrubias y fue estrenada en junio del año pasado en el Festival de Annecy (Francia).
¿Dónde ver "Bestia"?
Bestia fue exhibida en múltiples ocasiones durante el año pasado. Tuvo un paso por la popular plataforma chilena Ondamedia, el Centro Arte Alameda y la Cineteca Nacional, no obstante, todavía quedan algunas opciones para poder verla antes de la gran noche.
Una de ellas es en la Biblioteca de Santiago, donde todos los jueves de febrero (3, 10, 17 y 24) se exhibirá en el Auditorio de manera presencial con entrada liberada y aporte voluntario a las 18:30 horas.
La otra es a través de Vimeo, donde se puede arrendar por un periodo de 48 horas o comprarlo para verlo en el momento que estime conveniente. El valor del arriendo es de 2.20 dólares ($1.800 pesos), mientras que la compra es por un valor de 5,50 dólares ($4.500).
La historia detrás de Bestia
Si bien el corto está inspirado en su vida, no es un trabajo biográfico. Es la definición que insiste en entregar su director sobre la historia que cuenta su cortometraje. Extrae elementos de Íngrid Olderöck "la mujer de los perros", quien fue Mayor de Carabineros antes de integrarse a la DINA en 1973.
Ahí entró con el grado de capitana y participó en la Escuela Femenina, donde alrededor de 70 mujeres fueron instruidas para cometer torturas y realizar tácticas represivas contra opositores a la dictadura militar.
El 15 de julio de 1981 sería víctima de un atentado ocurrido en su domicilio, al recibir un disparo en la cabeza por integrantes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Después de eso y de su retiro, murió el 17 de marzo de 2001 a los 58 años, producto de una hemorragia digestiva aguda.
Planteado como una “reflexión sobre la maldad” que se inscribe en el thriller psicológico, Bestia estudia la mente de una torturadora, una mujer con una rutina inamovible durante la dictadura militar, la cual se puede apreciar en en el corto. Siempre está junto a su perro, quien incluso se le aparece en las inquietantes pesadillas que la acompañan cada noche.
