Sin duda, Samuel L Jackson es uno de los actores más famosos de Hollywood desde hace varias décadas tras haber aparecido en más de 150 películas. Y a pesar de lo famoso que es, siempre ha cuidado su privacidad ante los medios de comunicación.
Sin embargo, hubo una entrevista en la que reveló un peligroso accidente que sufrió en la década de 1980 y que podría haberle quitado la vida. A continuación, te contamos qué fue lo que ocurrió.
El grave accidente que casi mató a Samuel L Jackson
En entrevista con Vanity Fair, Samuel L Jackson reveló que sufrió un accidente en la ciudad de Nueva York. Tales hechos se remontan al 14 de diciembre de 1988, cuando su pié se quedó atascado en la puerta de un vagón del metro.
La situación provocó que el actor se cayese para atrás con fuerza y, si no hubiese sido por la mochila que llevaba, habría tenido un traumatismo craneal a causa del golpe. Sin embargo, esto no terminó con la caída, ya que el tren subterráneo igualmente se puso en marcha con el pie del actor enganchado, siendo arrastrado por el andén a medida que este agarraba velocidad.
El tren entró al túnel, y Samuel L Jackson asumió que iba a morir. "Iba a ser una Navidad triste", dijo a la revista.
Y menos mal, hubo un hombre con muletas que lo salvó tirando el cable de seguridad del vagón.
Esto provocó a Samuel L Jackson una grave lesión en su rodilla, ya que se le desgarró el ligamento cruzado anterior y también se dañó el cartílago. Por esta situación, tuvieron que realizarle una operación, teniendo que estar 10 meses utilizando muletas y realizando dolorosas sesiones de rehabilitación.
Sin embargo, eso no fue todo. Ya que el actor se volvió adicto a los medicamentos que le suministraron para aliviar el dolor de su rodilla.
Una indemnización y Pulp Fiction
Y al mismo tiempo, Samuel L Jackson tuvo que dejar de lado su incipiente carrera en el mundo del cine. Aunque igualmente pudo seguir trabajando con Spike Lee mientras, al mismo tiempo, trataba su adicción en un centro de rehabilitación.
El incidente enfrascó al actor en una batalla judicial para pedir una indemnización por los daños causados por el accidente. Sin embargo, tal juicio se prolongó hasta 1994, cuando se falló a su favor y lo indemnizaron con 560 mil dólares. Aunque la Autoridad de Tránsito de Nueva York impugnó el veredicto dos años más.
El fallo coincidió con el estreno de uno de los mayores hitos de su carrera: Pulp Fiction de Quentin Tarantino.