Este 2021 se cumplen 16 años desde que se estrenó una de las películas claves del siglo XXI. Se trata de Brokeback Mountain (Secreto en la Montaña), filme que contaba la historia de dos hombres enamorados que debían ocultar su relación al mundo. Aunque no era ni de cerca la primera película LGBTQ+ en el cine, era quizás la primera en alcanzar tal nivel de cobertura por los medios.
Después de todo, tenía a un estudio como Focus Features en la producción y a estrellas como Heath Ledger y Jake Gyllenhaal, de los actores más importantes de su generación. Sin duda, esto logró ampliar una conversación sobre estas historias y la importancia de contarla frente a un público masivo.
Sin embargo, el camino no fue nada sencillo y el mundo de hace casi dos décadas atrás era mucho menos amables a los relatos LGBTQ+. En este aniversario de Secreto en la Montaña, ¿Cómo ha cambiado la percepción del filme y su importancia?. Así mismo, ¿Cómo ha cambiado la representación del cine LGBTQ+?.
Los desafíos de Secreto en la Montaña
En papel, la historia de Secreto en la Montaña no es algo completamente innovador. Una pareja separada por los prejuicios de la sociedad y que deben ocultar su intenso romance. Incluso en las películas LGBTQ+ este era un tema bastante explorado. Sin embargo, el filme causó todo un fenómeno.
Secreto en la Montaña contaba la historia de Ennis del Mar y Jack Twist, dos hombres en la zona rural estadounidense de la década de los sesenta, que comienzan un apasionado romance que esconden del resto del mundo. Así, las décadas comienzan a pasar mientras ven cómo sus vidas se pierden con el paso del tiempo.
La historia no fue nada sencilla de vender. Focus adquirió los derechos de la historia en 2001, pero no encontraban patrocinadores que la aceptaran. Los filmes LGBTQ+ anteriores eran mucho más ligeros en sus tramas (Las aventuras de Priscilla, reina del desierto), bajo perfil (Happy Together) o con una homosexualidad implícita (My Own Private Idaho).
Así mismo, no muchos actores se atrevían a un filme como Secreto en la Montaña. Los interpretes heterosexuales dudaban si sumarse a la historia, mientras que los actores gays muchos aún estaban en el "closet" o ni siquiera fueron consultados al no representar la "masculinidad tradicional".
El guion de Secreto en la Montaña llegó a manos de Heath Ledger, quien rápidamente se enamoró de Ennis como personaje y quería ser parte del filme. Por su parte, Jake Gyllenhaal era una gran fanático de Ledger y quería ser parte de la película sí o sí y compartir escena con él.
Las impresiones iniciales
Tras el estreno de Secreto en la Montaña, los críticos se rindieron completamente a la historia, llamándola una de las mejores películas del año. La dirección Ang Lee, el guion de Larry McMurtry y Diana Ossana y las interpretaciones de Heath Ledger y Jake Gyllenhall fueron aplaudidas y premiadas.
Sin embargo, las audiencias tuvieron más problemas en aceptarla. Aunque hoy se le premia como un clásico de este siglo, múltiples personas reaccionaron con burlas. "La película de los vaqueros gay" se volvió una broma recurrente en la época, donde la relación principal era mofada pese a la trágica historia que se contaba.
Esto no le pareció nada bien a Heath Ledger, quien claramente se había comprometido a contar esta historia de amor. "Para mi no es un chiste, esto es sobre el amor", le habría dicho Ledger a Gyllenhaal cuando se enteró que los Oscar planeaban todo un segmento para reírse de la película.
La noche de los Oscar
Secreto en la Montaña llegó con ocho nominaciones a los Premios Oscar y como una de las absolutas favoritas. Cuando Ang Lee ganó como Mejor Director y los escritores ganaron a Mejor Guion, era un claro indicio que el filme se alzaría con el premio a la Mejor Película.
Sin embargo, cuando se anunció el premio, el Oscar fue para Crash, un filme mucho más mixto y con menos impacto que Secreto en la Montaña. El acto se vio como un claro desaire y como un mensaje sobre el rechazo al núcleo de la historia y las temáticas LGBTQ+ que mostraba. Hoy, se le considera de los más grandes robos en la historia de la ceremonia.
Las lecturas actuales de Secreto en la Montaña
Pese a este desaire, Secreto en la Montaña hoy es recordada como una de las mejores películas del siglo y una enorme influencia a que estudios grandes se abrieran a hacer más películas LGBTQ+. En 2015 se lanzó Carol, un drama sobre el amor imposible de dos mujeres, bastante explícito en dejar claro que eran lesbianas y no solo "una historia de amor sin importar el género".
https://www.youtube.com/watch?v=7nvGa6xGWhk&t=29s
Pero al igual que el filme de Ang Lee, Carol perdió bastante Oscar pese a su aclamación. De hecho, ni siquiera fue nominada a Mejor Película, en otro extraño movimiento de la Academia. En 2017, Call Me By Your Name, una película sobre un joven que se enamora de un hombre mayor, logró ser el filme LGBTQ+ con mayor recaudación en años.
Call Me By Your Name
Sin embargo, el filme se centra en gran parte en desexualizar a sus personajes. Queda claro que no es una película LGBTQ+, sino que una de dos hombres enamorados. Es una sutil diferencia, pero se asegura de ceder ante miradas heterosexuales sobre el romance e ignorar las identidades de sus personajes.
Mucho más compleja fue Moonlight, que se centraba en la sexualidad de su personaje pero considerando también su contexto, las percepciones de masculinidad en la cultura afrodescendiente y la vulnerabilidad de sus personajes.
Moonlight
Estos son solo algunos de los ejemplos más famosos del cine LGBTQ+ en la gran pantalla, con distintos niveles de éxito. Sin embargo, son pocas las historias que logran el mainstream y que son directamente LGBTQ+ sin intentar esconder la sexualidad de sus personajes o simplificarla al punto del aburrimiento (*cof* Love Simon).