La carrera de ABBA fue corta: solamente crearon música entre 1972 y 1982. Entre esos años lanzaron los sencillos más pegajosos de la historia, ganaron en Eurovision en 1974, fueron uno de los grupos más exitosos de Universal, crearon música para la UNICEF y además impusieron toda una moda. Sin embargo, la banda tomó una decisión histórica al combinar trabajo con familia, y cuando los matrimonios de Agnetha y Björn; y de Benny y Frida terminaron, también lo hizo la banda. ¿Qué hicieron en todos esos años?
Agnetha la ermitaña
Luego de la ruptura de ABBA mantuvo una carrera solista como cantante. En 1983 lanzó su primer disco en solitario, llamado Wrap Your Arms Around Me, que logró ser el número 1 en su países y otros vecinos de Europa. Estrenó varios proyectos en esa década, pero eventualmente se tomó un descanso. Regresó a la música en 2004 y luego en 2013, aunque tuvo hits solo en su continente.
Desde 1990 que vive en la isla Ekerö, en Suecia, donde evita el asedio de la prensa y lleva una vida tranquila. En esa década tuvo que enfrentar un divorcio y el fallecimiento de su madre, y posteriormente el término de una relación.
Björn y Benny, los amigos inseparables
Aunque la banda se acabara, esta dupla siguió creando música. Juntos desarrollaron el musical Mamma Mia!, primero para Broadway y luego para el cine, a fines de los 90. Ambos trabajan en paralelo escribiendo para la industria, lo que los ha consolidado como guionistas y como compositores.
Además, Björn es parte de la empresa informática NoteHeads, la que creó un software de escritura musical llamado Igor Engraver. Por su parte, Benny se enfocó en la música orquestral y además en tratar su adicción al alcohol. Nos alegra mucho saber que lleva sobrio más de una década.
Frida en la realeza
Si bien los destinos de los otros integrantes de ABBA están muy relacionados a la música, Anni-Frid, o Frida, solamente grabó dos discos luego de la ruptura. En 1992 contrajo matrimonio con el príncipe Heinrich Ruzo Reuss von Plauen, de Alemania. Esto la convirtió en princesa de Reuss y condesa de Plauen, por lo que dedica su tiempo a causas benéficas por el medioambiente y para la prevención del consumo de drogas. Lanzó otros sencillos, pero, igual al resto, no le fue tan bien como en conjunto.
Así que ahí la respuesta: estaban en silencio como banda, pero cada uno intentaba encontrar su propia voz. Cuarenta años después hoy nos deleitan con su nuevo disco, Voyage.