Benedict Cumberbatch ya es un actor consagrado y famoso por su amplio rango de personajes en el cine. Fue nominado al Óscar el 2015 por su papel en The Imitation Game, se robó nuestros corazones como Dr. Strange en Marvel y ofreció una de las versiones más fascinantes de Sherlock Holmes en la serie de la BBC. Pero nada de eso es suficiente y sigue sumando aplausos, siendo los más recientes por su partipación en la película The Power of the Dog.
Esta cinta es una adaptación de la novela de 1997 de Thomas Savage, un escritor estadounidense que se especializó en las historias del Viejo Oeste. Pero más que eso, sus libros se enfocan en dinastías familiares disfuncionales, marcadas por el odio y la venganza.
Meterse en el personaje
Recapitulemos un poco. La directora Jane Campion seleccionó a Cumberbatch para interpretar a Phil Burbank en su cinta The Power of the Dog. Este personaje es un ranchero violento que se dedica a destruir la vida de su cuñada, interpretada por Kirsten Dunst; y el hijo de ella, representado por el actor Kodi Smit-McPhee.
Benedict se tomó tan serio su personaje que viajó a Montana para aprender a tocar el banjo y a castrar toros. Esto lo complementó con la decisión de dejar de bañarse e ignorar a sus colegas en el set, con el objetivo de mantener la escencia de Burbank. Pero además de esto también aprendió a enrolar cigarros con una sola mano, los que luego fumana incesantemente. Tanto así, que se intoxicó con nicotina tres veces.
En una entrevista reveló este último detalle: "Cigarros sin filtro, justo después de una toma y de otra toma. Me intoxiqué con nicotina tres veces. Cuando tienes que fumar mucho, es genuinamente horrible". Pese a esto, el actor confesó que se tomó este proceso como un desafío personal para expandir sus barreras, lo que hasta ahora lo proyecta como un posible nominado al Óscar. Ojo, que la película se estrenará el 1ro de diciembre en Netflix.