Existen noticias que nos hacen perderle el miedo al futuro. Una de ellas es que Björk, la reina de Islandia, nos trae noticias sobre su nuevo disco. Este proyecto es el décimo álbum y nos promete ser tranquilo y bailable al mismo tiempo, o chill, como indicó ella. ¿Un sueño imposible? ¿una meta que solo ella podría lograr? ¿más magia del björkverse?
Headbanging y una copa de vino
En una entrevista con el medio islandés RUV, la artista se sinceró sobre su vida en la pandemia y sus últimos trabajos. Su último estreno fue Utopia, en 2017, pero en los tiempos recientes ha hecho giras con su show orquestal. Sobre su próximo álbum explicó que es como "un hombre que estaba haciendo headbang, luego se sentó y se sirvió otra copa de vino, y todos llegan a la casa antes de las 10 de la noche, dando por terminado el baile y todo eso". Además de eso, agregó que la mayoría de las canciones tienen entre 80 y 90 beats per minute porque esa es la velocidad a la que ella camina.
También añadió para quienes está dedicado este nuevo lanzamiento: "para las personas que arman discos en su living, restringidos a su 'círculo de Navidad'". Es decir, para quienes han cumplido las medidas de aislamiento y que solo comparten con sus personas más cercanas.
En cuanto a las canciones, explicó que son relajadas: "En este nuevo disco hay muchos sonidos chill en la primera mitad de las canciones y luego mucha calma en la segunda, pero cuando queda un minuto se transforma en una disco".
La vida en pandemia
Ya dejando de lado su trabajo y hablando sobre su nueva normalidad, ella explicó que "nunca lo había pasado tan bien", y añadió que "no había estado tan enérgica desde que tenía 16 años". Más adelante agregó: "Me despierto todos los días en mi cama, siempre sorprendida y aterrizada y con calma".
Finalmente, cerró con su visión sobre esta crisis en su país: "Nosotros como islandeses somos muy afortunados porque nos está yendo bastante bien en comparación a otras naciones que han tenido que lidiar con esta pandemia".
