Durante la jornada de ayer se vivieron múltiples actividades y convocatorias en el marco del Día Internacional de la Mujer. Una de ellas, fue la marcha que se realizó en el corazón del Centro de Santiago, al que asistieron muchas mujeres, incluyendo a una influencer nacional de la farándula que terminó en el suelo: Naya Fácil.
La joven afirmó que tras subirse al polémico monumento a Baquedano, se cayó y terminó en el hospital:
"Los videos que andan son reales, si tuve un accidente y me caí desde la estatua, perdí conciencia", afirmó desde su cuenta personal de Instagram.
Ante la situación, muchos seguidores de la influencer se mostraron interesados en la salud de ella, una preocupación que Naya finalmente agradeció:
"Muchas gracias a toda la gente por preocuparse por mi, hoy fueron un amor con tanto cariño de siempre conmigo. Son cosas que pasan y seguiré saliendo adelante a pesar de todo, también gracias a los enfermeros por tratarme como una reina, agregó.
Sin embargo, esta situación generó gran humor en ella:
“Todos los del hospital me atendieron bien y con delicadeza estaban cagado de la risa cuando les dije que me caí de un caballo”.
Pero, ¿quién es Naya Fácil?
Esta joven se hizo conocida gracias a las redes sociales hace algún tiempo. Sobre todo en tiempos de pandemia.
Anteriormente, solía desarrollarse como trabajadora sexual. Sin embargo, con las vueltas de la vida, actualmente se dedica a potenciar su personaje en internet.
Es conocida por realizar videos en los que se le muestra en distintas celebraciones y fiestas. En esas ocasiones, Naya Fácil deja en claro su pasión por la vida nocturna, ya que disfruta mucho salir.
Pese a tener grandes fiestas en su vida, esta no se ha visto exenta de polémica. De vez en cuando Naya Fácil sube videos ingiriendo sustancias ilícitas y cometiendo actos indebidos.
Los excesos sumados a una mala infancia, en donde no ha podido prosperar debido a la desigualdad que existe en nuestro país, ha llevado a que la joven tenga varios episodios de suicidio. De hecho, el más reciente fue hace un par de días atrás:
“Me cansé, de verdad. La gente no piensa que yo soy persona, que yo siento, que yo tengo pena. Que si me defiendo es porque estoy recibiendo estos ataques. No le he hecho nada a nadie, chiquillos. Me están sacando unos videos de hace años atrás. Me cansé de la vida”, fueron las palabras con las que denunciaba el ciberacoso que sufre.
Esta situación refleja que hoy más que nunca la salud mental es una prioridad que se debe tomar en cuenta, sobre todo para quienes no tienen la posibilidad de comprometerse con profesionales ligados a ese ámbito.