Sabemos que cada era en la historia de la música fue vital para el surgimiento de nuevos géneros musicales y técnicas que comenzaron a emplearse en futuras canciones. Hoy es muy común el uso del auto-tune en el pop, la música electrónica y hasta en el hip-hop. Pero esta técnica, también conocida como “Efecto Cher”, surgió justamente con una canción de la artista de 74 años.
Su canción “Believe” , fue el éxito más grande de la carrera de Cher, y se lanzó hace más de 20 años, teniendo su auge en 1999 cuando era tocada en radios y en las pistas de baile de todo el mundo.
El difícil momento de Cher
Después de haber publicado su disco “It’s a Man’s World” en 1995, este no vendió bien, la crítica especializada no lo evaluó como ella y su disquera esperaban, y los medios se burlaban de ella debido a sus cirugías estéticas y cambios de estilo. Además, en enero de 1998, falleció su exesposo Sonny Bono de un accidente esquiando, con quien compartió dúo en Sonny & Cher.
A pesar de todo, su disquera, Warner Music, la convenció de grabar un nuevo disco, pero adaptándose a los nuevos sonidos que se avecinaban a finales de siglo: el pop electrónico.
Madonna, por otro lado, ya estaba a punto de cumplir 40 años y lanzaba su álbum “Ray of Light”, con el cual se demostraba que la música dance podía atraer a millones. Por ello, su equipo quiso dedicarse a seguir esa ruta.
El efecto Cher
La canción fue compuesta por seis autores además de la cantante, quien también se encargó de otras frases que fueron clave en la letra, la cual habla de cómo recuperar la confianza en uno mismo luego de las penurias amorosas.
Quienes se encargaron de darle ese toque electrónico que se estaba popularizando, fueron los productores Mark Taylor y Brian Rawling, quienes terminaron por darle un toque más “trance” que pop, junto con una guitarra eléctrica, un bajo perfecto para las pistas de baile y la voz electrónica de Cher con la famosa técnica “auto-tune”.
Esta técnica fue una idea de Taylor que al principio no fue muy bien recibida por los ejecutivos de Warner Music, por considerarla un poco extravagante. Sin embargo, la misma cantante fue quien se negó a que le quitaran este truco tan distintivo en la canción, según contó a The New York Times: “Yo dije, ‘puedes cambiar parte de él… ¡sobre mi cadáver!”, declaró la cantante recordando una reunión con el presidente de su disquera. “Ese fue el fin de la discusión. Le dije (a Taylor), antes de irme, ‘No dejes que nadie toque esta canción, o voy a arrancarte la garganta’”.