Una triste noticia se vive con respecto a la búsqueda de los tres alpinistas que se encuentran desaparecidos en el K2 de Pakistán. Entre los que se encuentran el chileno Juan Pablo Mohr, el islandés John Snorri y el pakistaní Ali Sadpara.
Un comunicado realizado por Vanessa O'Brien, una de las encargadas especialistas que se encuentra trabajando en la búsqueda de los montañistas, afirmó que aún no se sabe nada al respecto de ellos.
Esto, debido a que unas imágenes satelitales demostraron que había objetos en la cima de esta montaña, los que podrían resultar ser de los alpinistas. Sin embargo, O’Brien confirmó que esto no
"Desafortunadamente, estos cables resultaron ser un saco de dormir, carpas rotas o almohadillas para dormir. Ninguno de ellos fue Ali Sadpara, Juan Pablo Mohr o John Snorri Sigurjonsson".
El comunicado, publicado ayer, también hizo un llamado a ser consecuentes con las familias y seres queridos de aquellos alpinistas, ya que los momentos que están pasando son muy difíciles:
“Estos tres montañistas fuertes y valientes tienen 13 hijos, John Snorri (6), Ali Sadpara (4) y Juan Pablo Mohr (3), y sé que todos se sintieron amados por sus familias. Por favor, deles a estas familias tiempo, espacio y compasión. Comparta sus historias sobre ellos, para que sean recordados".
UNA BÚSQUEDA DIFÍCIL EN EL K2
La búsqueda de los alpinistas ya lleva 11 días, por lo que cada vez se hace más complejo poder obtener información sobre su paradero. Subir esta montaña significa un gran esfuerzo, ya que hay que tener las capacidades físicas y técnicas para poder encumbrarse a ella:
"Si escalar la segunda montaña más alta del mundo en invierno es difícil, encontrar los KS que faltan es un desafío aún mayor. Hemos examinado imágenes satelitales, utilizado tecnología SAR (radar de apertura sintética). Hemos escaneado cientos de imágenes, trazado más puntos, releído planes de cumbres y verificado testimonios y tiempos", se menciona en el comunicado.
Recordemos que K2 es la segunda cumbre más alta del mundo después del Everest. Con 8.611 metros sobre el nivel del mar se posiciona como una de las montañas más difíciles para subir.