Una investigación hecha por el Foro Económico Internacional (WEF, por sus siglas en inglés), explica que hoy en día existe la “doble alteración” de los empleos, debido al avance de la automatización y a la pandemia por Covid-19. Este estudio proyecta, a diferencia de ciertas teorías que anticipan un mundo dominado por las máquinas, que para 2025 se crearán más empleos de los que van a desaparecer.
Esto porque el mismo avance de la tecnología hará que la sociedad deba estudiar las nuevas exigencias, que abren nuevas posibilidades. De hecho, “esto ha ocurrido en cada una de las revoluciones industriales”, dice a la BBC Stefanova Ratcheva, investigadora del WEF.
Sin embargo, recalca que pese a la creación de trabajos emergentes en las áreas nuevas, se necesita de inversiones para que los futuros trabajadores puedan “entrenarse y transitar hacia los nuevos empleos”. Que debieran provenir de las empresas y los gobiernos, afirma.
¿Cuáles son las claves del futuro de los empleos según WEF?
En primer lugar, que la automatización de la fuerza laboral crece cada vez más y que con el paso de los años, las empresas compartirán el trabajo humano con el de las máquinas. Pese a esta desalentadora afirmación, otra de las claves es que “La revolución tecnológica creará 97 millones de nuevos empleos hacia 2025”.
Dentro de las áreas que se potenciarán se encuentran por ejemplo, la economía verde, el análisis de datos, la inteligencia artificial, el desarrollo de productos, entre otros.
Así también se han referido a las habilidades que serán más requeridas en 2025, indagadas gracias a las métricas de Linkedin y Coursera. Estas son, el pensamiento analítico, la creatividad y la flexibilidad. A ellas se suma también el pensamiento crítico, la resolución de problemas, la resiliencia y la tolerancia al estrés.
Otra de las claves es que las empresas más competitivas mejorarán las habilidades de sus empleados porque pondrán todos sus esfuerzos en ello, incluso, si es necesario volver a capacitar, así se hará. Aspecto que se ha masificado como “aprendizaje para toda la vida”, según la institución. Pero, para WEF esto no está solo en manos del sector privado, debido a que el gobierno también debe poner de su parte.
WEF ha expresado que otro de los puntos es que “el trabajo remoto llegó para quedarse”, aspecto que se ha acrecentado gracias a la pandemia por coronavirus y la obligación de trabajar desde los hogares.
Finalmente, y ante todo esto, advierten que un aspecto negativo es que posiblemente la desigualdad se vea agravada, sobre todo en aquellos países de menor desarrollo.
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Revisa los detalles del estudio pinchando aquí.