En una pequeña localidad de Indonesia ubicada en la Isla de Java, las autoridades han tomado una dura medida. Las personas que se rehúsan a usar mascarilla en público.
Y es que aquellos que incumplan las normativas para frenar la propagación del nuevo coronavirus en Gresik, deberán cavar las tumbas en las que serán enterradas las víctimas del Covid-19.
Según un reporte publicado por The Jakarta Post, ocho personas fueron condenadas a cavar tumbas para los fallecidos por Covid-19 como castigo por negarse a seguir los protocolos sanitarios establecidos para enfrentar la pandemia.
El jefe de distrito, identificado como Suyono, dijo sobre el castigo impuesto por no usar mascarilla:
"En estos momentos tenemos solo tres excavadores disponibles, así que creo que debemos poner a estas personas a trabajar con ellos".
El castigo por no usar mascarrila se está llevando a cabo en el cementerio público de Ngabetan, una villa de Gresik. El plan es dividirlos en equipos que asistan a los profesionales de la excavación. Uno cavará la tumba y el otro instalará tablas para acomodar los ataúdes. "Esperamos que esto genere un efecto que logre detener las infracciones", continuó Suyono.
Según la Universidad Johns Hopkins de Baltimore, en Estados Unidos, Indonesia registra hasta este 14 de septiembre un total de 221.523 casos, con poco menos de 8.900 muertes.