38 víctimas fatales dejó el accidente del Hércules C-130, ocurrido el 9 diciembre de 2019 en el Mar de Drake. El avión cayó al océano en una tragedia que hasta el momento se había calificado de presunta desgracia, pero que ahora lleva la clasificación de cuasidelito de homicidio.
Lo anterior es porque el Fiscal Regional de Magallanes, Eugenio Campos, entregó nuevos detalles de la indagatoria, en la que se detectaron dos desperfectos en la aeronave Hércules C-130.
De acuerdo a El Mercurio, Campos señaló que "desde el 10 de diciembre se han desarrollado un cúmulo de requerimientos de información y en esa recopilación de antecedentes, como también del análisis que hace de los mismos la policía y la Fiscalía, hemos detectado algunos antecedes (...) por lo que hoy en día estamos investigando eventualmente la participación y responsabilidad de terceras personas en la causa y origen del siniestro del vuelo".
"Estamos indagando con fuerza con la PDI y contamos no solo con testimonios, sino que también con alguna u otra evidencia, las cuales nos permiten materializar aquel sustento", afirmó también el Fiscal de Magallanes.
La Fiscalía cambió la categoría del delito a fines de enero. Entre los antecedentes descubiertos se encuentran dos desperfectos que tuvo el Hércules C-130, que sí fueron comunicados por la tripulación y “algunos especialistas relataron tener antecedentes”, antes de partir rumbo a la Antártica, destino al cual no llegó.
El reportaje de El Mercurio también detallaba que el avión llevaba dos bultos de "mercancía peligrosa": 25 tinetas de 18 litros de pintura, 59 galones catalizador componente B, 30 galones de anticorrosivo, 22 bidones de cinco litros de diluyente, tres galones de esmalte sintético, 12 tapagoteras, buzos desechables y otros elementos. Todos ellos estaban destinados como materiales para realizar trabajos en la base Antártica.
La investigación sobre el caso Hércules C-130 aún está en curso.
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