La Dirección Nacional de Agua, está trabajando en un documento llamado Balance Hídrico Nacional, el que después de 32 años arrojará resultados de cuanta agua disponible existe en el país. Sin embargo, estableció que el país tiene un déficit que oscila entre 10% y 37%.
Ante este complicado escenario, se creó Escenarios Híbricos 2030, iniciativa que busca realizar cambios, entre el periodo 2030-2050. Esta idea fue creada en 2016 por Fundación Chile, la Fundación Futuro Latinoamericano y Fundación Avina.
Por lo mismo, este martes presentarán el estudio “Transición Hídrica: el futuro del agua en Chile”, en un evento que será encabezado por la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt. El documento presenta una estrategia que contempla cuatro puntos a tomar en cuenta.
Proyecto
Los ejes en cuestión están enfocados en la gestión e institucionalidad del agua, conservación y protección de los ecosistemas hídricos. También contempla la eficiencia y uso estratégico del recurso hídrico, además de la migración e incorporación de nuevas fuentes de agua.
Estos puntos, incluyen una gestión integrada de recursos hídricos, un sistema nacional de información, áreas de protección, recuperación y conservación de ríos y humedales, reforestación y sistemas de riego optimizado. Otras soluciones como embalses para acumulación de aguas, desalación mediante osmosis y tratamiento de aguas servidas, entre otros.
En conversación con Qué Pasa, el subgerente de Fundación Chile y líder de Escenarios Híbridos, Ulrike Broschek indicó que implementar estas cuatro medidas podría alcanzar una importante seguridad hídrica.
“El 44% de las causas de los problemas hídricos se relacionan con una deficiente gestión del recurso, el 17% se debe al aumento de demanda del agua, 14% a la contaminación del agua, 12% a la disminución de la oferta de agua, 6% a un daño ambiental de los ecosistemas hídricos y 5% al alza de la frecuencia de desastres naturales”.
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Un factor no menor a tomar en cuenta, es la sobre demanda del agua, el que se ha visto agravado por los derechos de aprovechamiento de las mismas, las últimas décadas. Chile está dentro de los 30 países con mayor estrés hídrico, y se estima que en 2040 será el único en Latinoamérica bajo esta condición.
A propósito de esto, Broschek indicó que Chile "proyecta pasar de un estrés hídrico ‘medio’ en 2010 a un estrés ‘extremadamente alto’ en 2040. Además será una de las naciones con mayor probabilidad de enfrentar una disminución en el suministro de agua, debido a los efectos combinados del alza de las temperaturas en regiones críticas y los cambios en los patrones de precipitación”.
Además agregó que sin duda los avances legislativos en este tema, no ayudan a avanzar en las soluciones. “La poca voluntad política que ha existido en los últimos 20 años y el insuficiente avance en la temática, la situación es grave. Si salimos de las visiones sectoriales, reconocemos que debemos cambiar la forma de gestionar el agua.