No. No lo estás imaginando. Con el paso de los años la duración de las canciones ha tendido a acortarse y es que las bandas y artistas se han ido adaptando a las nuevas exigencias del mercado que ha cambiado a pasos de gigante con la llegada de aplicaciones de streaming, que manejan el 75% de los beneficios de la industria musical discográfica.
Y la razón es muy sencilla: Spotify, Apple Music y otras plataformas, pagan a las bandas musicales por reproducción, independiente de la duración de cada tema. Pero eso no es todo, porque otro de los factores determinantes en esta historia ha sido el avance de los formatos.
Hoy puedes cortar rápidamente un tema y cambiar entre canciones si estás aburrido, algo que con los cassetes y vinilos por ejemplo, se hacía mucho más difícil. Así explica el fenómeno a la BBC el productor británico Mark Ralph.
¿La evidencia?
Una reciente investigación realizada por académicos de la Universidad de Ohio State, de Estados Unidos, reveló que entre 1986 y 2015, la duración de las canciones ha disminuido en un 78% y en esa misma línea otros estudios refuerzan el hallazgo.
De hecho, las canciones de hoy en día duran en promedio 20 segundos menos que las de hace 5 años. Así al menos lo evidencia el Billboard Hot 100, lista de popularidad de los 100 sencillos más vendidos en los Estados Unidos que se publica semanalmente.
Según consigna el sitio Quartz, los discos de Drake, Kanye West y Kendrick Lamar son, en promedio, entre un 11% y un 38% más cortos en comparación a sus primeros lanzamientos.
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