Hasta en un 20% han crecido las consultas por enfermedades respiratorias en consultorios y se estima que dentro de las próximas 2 semanas se produzca el peak.
Sin embargo, no somos sólo los seres humanos quienes sucumbimos ante la dureza del frío, la lluvia y la contaminación. Nuestras mascotas también pueden padecer enfermedades.
Por eso hay alguno cuidados que deberías aplicar:
- Cuida su porción de alimento: Con el frío la demanda energética sube y por ende, se hace necesario un consumo más elevado de calorías. No se trata de aumentar la porción de alimento, pero si debes preocuparte de que tu mascota lleve una dieta equilibrada y suficiente.
- Sigue con los paseos, pero preocúpate de que no pase frío: Hay personas que ante las bajas temperaturas optan por suspender el paseo diario de sus mascotas, pero esto es un gran error. Todo animal necesita salir, al menos una vez por día y sólo basta con que lo cuides de los cambios bruscos de temperatura. Si su pelo es muy corto, puedes aplicar algún abrigo adicional.
- Procura que tome agua limpia: Es muy común que luego de la lluvia se formen posones naturales y los animales tienden a consumir esa agua. Sin embargo, esta podría estar contaminada y la forma de evitarlo es que siempre tengas a su alcance un recipiente con agua limpia. Así lo estarás cuidando de posibles infecciones.
- "Prevenir es mejor que lamentar": Una cita con el veterinario en esta época no es una mala idea. Puedes hacer un chequeo general para confirmar que todo ande bien, ajustar la dosis y marca de alimento, el nivel de ejercicio, vacunas, etc.
- Atento a las alertas: Las enfermedades respiratorias en perros y gatos son muy comunes en esta época. La inapetencia es uno de los primeros síntomas que aparecen, como también el decaimiento y la congestión nasal. Si esto empeora a pesar de tus cuidados, visita al veterinario.
- Evita bañarlo tan seguido en esta época: Hay personas que bañan muy seguido a sus mascotas y en invierno no es recomendable. ¿La razón? Al bañarlos manera constante les disminuye el "manto seboso" que es muy beneficioso para evitar el frío y bajar la exposición a infecciones dérmicas.
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