Manejar respuestas inteligentes, contar con un soporte offline y programar cuándo queremos que nos vuelva a aparecer un e-mail específico (), son algunas de las funciones que está terminando de probar Google antes de que todos podamos empezar a usar la nueva versión de Gmail.
Privacidad ante todo
Otro de los cambios que viene es el modo confidencial que, entre otras cosas, va a permitir que los receptores de e-mails no puedan reenviar, copiar, descargar o imprimir los correos recibidos, si es que el creador del correo original así lo desea.
Además, también se va a habilitar una función que sólo permita abrir mensajes ingresando un código de seguridad, el cual va a ser enviado vía SMS con fecha de caducidad.
El foco está en que nuestra experiencia sea cada vez más amigable y la plataforma más simple de usar, sin descuidar nuestra seguridad en Internet.
Por: Eduardo Cruz Jarvis