Cassie Martin es una joven normal que poco a poco se fue haciendo un nombre dentro de Instagram, red social en la que ya acumula más de 70.000 seguidores.
Para ello no hizo nada del otro mundo, declarando que lo único que hacía con su cuenta era subir selfies y fotografías de ella bebiendo vino.
En la otra vereda está Chris Burr Martin, su padre, quien veía las fotografías que subía su hija y los fuertes comentarios que muchas veces recibía, percibiendo esto como un peligro para ella.
Un primer indicio de esos peligros eran los comentarios que aparecían en muchas de las fotografías de la joven, pero -según comentó a The Sun- habría sido muy complicado responder uno por uno.
Entonces, Chris ideó una forma diferente de hacerle entender aquel dilema a su hija... además de aprovechar de trollearla, fiel a su sentido del humor: Imitar las fotografías de la joven.
Lo que nunca pensó que ocurriría sería que el resultado tendría una gran recepción en Instagram, donde ya tiene más del doble de seguidores que la joven Cassie.
Afortunadamente, esto no generó conflictos entre los dos, ya que Cassie entiende que su padre lo hace por protegerla, asegurando que ahora piensa dos veces las fotografías antes de subirla.
Mira aquí algunos ejemplos: