Las cucharas de palo son parte esencial de muchas cocinas, ya sea por tradición, gusto o porque su uso no daña el resto de los utensilios domésticos. Sin embargo, este implemento se puede transformar en el peor enemigo de una persona.
Al menos así lo explica el Sub Departamento de Control Sanitario de Alimentos de la Seremi de Salud Metropolitana, desde donde explicaron que "al ser la madera un material poroso, que capta humedad, puede permitir el desarrollo de hongos y levaduras.
"Además, la presencia de grietas o cortes permite que se acumulen restos de alimentos y humedad, convirtiéndola en un foco importante de crecimiento microbiano, transformándose en un material que supone un elevado riesgo sanitario".
Por lo mismo, los especialistas recomiendan no usar este tipo de utensilios para cocinar. Además, también pueden causar lo que se conoce como contaminación cruzada, es decir, que se traspasen bacterias de un alimento a otro.
"Hay que suprimir todos los elementos de madera para preparar alimentos. Son muy porosos y, por este motivo, absorben mucha humedad. Debido a esto, no se pueden dejar en remojo con un desinfectante", apuntó Patricio Godoy, director del instituto de microbología de la Universiad Austral de Chile.
Y aunque todos recomiendan usar implementos de plástico o acero, una forma de disminuir el riesgo –aunque sin hacerlo desaparecer en su totalidad- es someter las cucharas de palo a un tratamiento de agua hervida.