El silencio y la tranquilidad es buscada incesantemente por algunas personas, quienes buscan alejarse por al menos unos minutos de los intensos ruidos que se registran en las diversas ciudades del mundo. Pero la ausencia de sonidos no siempre puede traer buenas consecuencias para nuestro organismo, ya que en algunos casos esto puede incluso provocar que caigamos en la locura.
Los lugares más silenciosos que en la actualidad podemos encontrar en la tierra son las llamadas cámaras anecoicas, las que están diseñadas para absorber todo tipo de sonido. Uno de estos espacios artificiales más efectivos pertenece a la empresa gigante de la tecnología, Microsoft, la que se encuentra en ubicada en la sede de la compañía en Redmond, EE.UU.
Esta cámara está recubierta por seis capas y es utilizada para probar los nuevos equipos que la marca está desarrollando. En dicho espacio se estima que el grado de absorción de sonidos es tan grande que si a un costado de esta despegara un avión, en el interior solo se escucharía un susurro.
Y es que gracias a este lugar que Microsoft pudo poner su nombre en el libro de récords de Guinness, ya que en la cámara anecoica de su pertenencia lograron alcanzar en el año 2015 la increíble cifra de -20,6 decibeles.
Pero este espacio no es capaz de entregar la tranquilidad que imaginas al momento de hablar de silencio, de hecho podría provocar serios daños para el ser humano. Esto debido a que según consigna el portal RT, nuestro cerebro puede ser víctima de una gran tensión, capaz de derivar en la locura.
Estas conclusiones surgieron tras un estudio realizado por los Laboratorios Orfield de Minnesota, Estados Unidos. Tras los experimentos concluyeron que pasados los 45 minutos al interior de una de estas cámaras comienzan a parecer síntomas de demencia. Esto debido a que nuestro oído comienza a buscar una nueva fuente de sonido, la que finalmente encuentra en el cuerpo con los latidos del corazón o el ruido que hacemos al momento de respirar.
Mira acá el video en que los expertos muestran cómo se consiguió el récord Guinness: