La persona que que protagoniza el video es Edgardo, quien el pasado mes de marzo se encontró con el ave en el patio de su casa, en Loncopué, una localidad en la provincia del Neuquén, Argentina.
Edgardo y el cóndor han protagonizado una linda historia. El hombre encontró a un pichón de cóndor en el patio de su casa, al cual ha ayudado desde hace meses para que crezca fuerte y sano.
Esta iniciativa ha sido monitoreada y permitida por el personal de Fauna de la provincia, y espera que con sus primeros vuelos el ave se incorpore a una condorera ubicada en esa zona, reconocida como su hábitat natural.
"Un día de marzo apareció acá solo y con una patita lastimada. Lo estuvimos curando de una lesión que no parecía ser grave y desde ese día se me acerca cada vez que lo llamo. Cuando me contacté con la gente de Fauna me dijeron que era un pichón macho que creen que nació en octubre del año pasado y que aparentemente había perdido contacto con sus padres", explicó Edgardo sobre cómo inició su vínculo con el ave, señala el portal el sitio LM Neuquén.
Edgardo sabía que "Condorito" (como fue bautizado el pichón) tenía que moverse por su hábitat y alimentarse por su cuenta antes de su primer vuelo. "Generalmente nosotros le dejamos comida para que aprenda a buscarla por su cuenta. En estos últimos meses hemos padecido la muerte de algunos animales por distintos motivos y nosotros decidimos dejarlos para que él pueda alimentarse".
Hace unas semanas Edgardo compartió la historia con su familia a través de un video que les envió por Whatsapp. "Supongo que por la historia algunos de ellos decidieron compartirlo con más gente. El video se viralizó por Facebook y muchos me han estado buscando para saber más ", señaló.
A su vez, aseguró que la dinámica que ha desarrollado con "Condorito" es evaluado por personal especializado y que su intención no es domesticarlo. El ave ya empezó a volar y ya se aleja de la casa. "Sigue apareciendo, pero cada vez menos, que es lo que esperábamos", aseguró.
Personal del Ecoparque de Buenos Aires conoció el caso a partir de la difusión del video en las redes y pretenden llevarse al ejemplar. No obstante, Edgardo manifestó que "el cóndor nació y se crió acá, y este es su hábitat natural. En este momento ya puede volar por su cuenta y en pocos días ya va a estar acostumbrado a vivir en la condorera que tenemos a pocos kilómetros".
"Dicen que vienen a buscarlo para llevarlo a un lugar adecuado, pero aquí el cóndor está al aire libre, en su hábitat natural y que reconoce como propio, así que no estamos de acuerdo con esa intervención", aseguró.
Si bien la historia se difunde en las redes como un encuentro entre el cóndor y quien lo curó de sus heridas, Edgardo aclaró que al momento de filmar ese primer video "Condorito" todavía no sabía volar.
"La gente exagera todas las historias. El cóndor no bajó del cielo para saludarme simplemente porque era pichón y todavía no había aprendido a volar. Y tampoco lo habíamos curado de una herida grave, sino que tenía una pequeña lastimadura", concluyó.