El pastor alemán se ha hecho muy famoso por su particular historia. Gavel entrenaba para convertirse en perro policial en Queensland en Australia, sin embargo, no logró entrar a la institución.
Lo que provocó gran impacto en las redes sociales es que el animal fue apartado de la división canes de la Policía por ser "demasiado tierno" para el servicio de la seguridad pública, consigna el portal Diario Popular.
Entre los 40 perros que eran adiestrados para ingresar a la policía, Gavel fue el único que reprobó. Mientras los demás animales cumplían las pruebas y obedecían las instrucciones el cachorro jugaba en el suelo, esperando recibir cariño.
No obstante, el animal no quedó desempleado. Su simpatía y ánimo de jugar, le permitió ser derivado para recibir a los visitantes de la casa de gobierno de Queensland, donde podrá recibir mucho cariño sin problemas.