Internet se ha convertido en un espacio muy particular. Un planeta ajeno al mundo real donde se suceden situaciones bastante particulares y que muchas veces son discordantes con lo que ocurre en la cotidianidad. ¿Cuántas veces has pensado que en redes sociales te transformas en otra persona?
Y es que el universo de Internet parece tan grande que conviven millones de personas con leyes inentendibles para cualquier gobierno. Son leyes que nunca fueron escritas, ni acordadas en ningún consejo parlamento. Son especies de 'mandamientos' que seguimos al pie de la letra, sin pensar que muchos rozan lo absurdo y tienen que ver con lo paradójico de la red.
Por si no los conocías, la nota de Gizmodo te ayudará a entender de qué se trata ésto:
Ley Cunningham, la madre de todas las leyes
Su autor fue el antiguo ejecutivo de Intel, Steven McGeady, quien aportó esta 'ley' en la Weekend Competition: Schott´s Law donde se invitaba a los lectores a generar nuevas leyes.
La ley explica que la mejor manera de conseguir una respuesta a una pregunta en la red es redactando una respuesta equivocada.
Ley de Poe, o la tiranía de los emoticones
Esta ley surgió en una página web cristiana en el contexto de un debate sobre el creacionismo. En ese momento apareció la figura de Nathan Poe para decir:
"Sin un emoticon que guiñe un ojo o alguna otra muestra clara de humor, es completamente imposible parodiar a un creacionismo de tal manera que alguien no lo pueda llegar a confundir con uno de verdad", apuntó.
Ley de Godwin, otra vez con los nazis
Era 1990 en el interior de Usenet, Mike Godwin, parte del equipo de la EFF, promulgó un enunciado que se ha mantenido vigente hasta nuestros días:
"A medida que una discusión online se alarga, la probabilidad de que aparezca una comparación en la que se mencione a Hitler o a los nazis tiende a uno", dijo.
Ésto es aplicable para varios dictadores alrededor del mundo.
La regla 34, o cómo el porno ya estuvo allí
Esta es posiblemente la norma más sencilla de entender: "Si existe, ya hay pornografía de ello". Dicho de otro modo, cualquier tema imaginable que veas en la red, posiblemente ya esté en su versión porno, y si no lo está, probablemente en breve perderá "la virginidad".
Efecto Streisand, porque a veces es mejor estar callado
Barbra Streisand denunció a un fotógrafo exigiendo que se retirase una foto aérea de su casa de una publicidad que contenía imágenes de la costa de California. ¿El resultado? Internet elevó a la categoría de meme aquella fotografía.
Todo aquel que intente censurar u ocultar información en la red, acaba consiguiendo lo contrario, que se divulgue aún más.
Ley de Pommer (y la sabiduría de Internet)
Si una persona tiene que insistir en la red que ha ganado una discusión, es probable que esa persona haya perdido el debate.
La ley Lovejoy, o "¡por el amor de dios, pensemos en los niños!"
Tras la famosa frase "¿Es que nadie va a pensar en los niños?", se esconde un vacío argumentativo de libro, y por tanto, se apela a la emoción. La frase pertenece a Helen Lovejoy (o Helena Alegría), la esposa del reverendo en 'Los Simpsons'.