Kendrick Lamar habló sobre el sucesor del aclamado To Pimp a Butterfly (2015), asegurando que se encuentra trabajando "muy urgentemente" en este proyecto.
En conversación con el New York Times, el oriundo de Compton dijo que cambió el foco de su música hacia su familia y comunidad por "la forma en la que las cosas han ocurrido dentro de los últimos meses".
Según explicó, "To Pimp a Butterfly estaba dando cuenta del problema. Estoy en un espacio en donde ya no estoy dando cuenta del problema. Estamos en un momento en donde excluimos a uno de los mayores componentes de toda esta cosa llamada vida: Dios".
Para el músico, "nadie habla de eso ya que está casi en conflicto con todo lo que pasa en el mundo cuando hablas de política, gobierno y el sistema".
Al contestar a la pregunta sobre cómo esto ha afectado a su forma de componer, Lamar lo comparó a la forma en la que los padres perciben a sus hijos cuando crecen: "Algún día tendré una pequeña niña. Ella crecerá. Siempre será la niña que adore, siempre la voy a amar, pero llegará un punto en el que experimentará cosas. Y esa dirá o hará cosas que puedes o no condenar, pero es la realidad y sabes que terminará yendo a ese lugar. Y es perturbador, pero tienes que aceptarlo".
"Esta es la analogía de aceptar el momento de cuando ella crece. En algún punto, esta pequeña niña crecerá y me contará de sus experiencias con las figuras masculinas, cosas que la mayoría de los hombres no quieren escuchar. Aprender a aceptarlo y no huir de ello, así es como quiero que se sienta este álbum", agregó.
A pesar de todo esto, Kendrick Lamar no dio fecha alguna para la salida de este nuevo registro, aunque se espera alguna novedad antes o durante su concierto en el festival Coachella del próximo mes.