Más allá de la talla, la cara de Melania Trump nos llega a contagiar la pena.
¿Pero qué dice realmente el lenguaje corporal del matrimonio? MIC conversó con las expertas Patti Wood y Susan Constantine, sobre el tema.
Parten ejemplificando con el momento cuando la pareja llegó a la Casa Blanca y el nuevo presidente fue a saludar a Barack y a Michelle Obama dejando a su esposa en el auto. "No solo no la esperó, subió las escaleras y saludó a los Obamas por su cuenta. Ni siquiera miró hacia atrás para ver si estaba allí o para ayudarla a subir las escaleras", dijo Wood. "Si no supieras que están casados, no sabrías que están casados", agrega Constantine.
"Melania es un objeto para Trump. No veo ninguna calidez, amor verdadero o compasión en esta relación", continúa la experta.
Todo se vuelve más evidente en una de las expresiones físicas más poderosas del ser humano: Bailar. O tratar de hacerlo, como se pudo ver. "Con eso dice: 'No quiero fusionarme contigo como socio'", dijo Wood. En cuanto a Trump, más que tratarla con cariño o respeto, "la cogía sexualmente", lo cual se evidenció al su pelvis a la de ella.