Un cartel muy similar al de nuestro Fauna Primavera hubo en el festival Music Wins, celebrado en Buenos Aires un día después del encuentro de día y de noche en Espacio Centenario y Espacio Riesco.
¿La gran diferencia? Mac DeMarco, el icónico músico canadiense que regresa a Sudamérica un año después de su última visita.
Y regresó relajado, enamorado, y dispuesto a todo en un festival donde tenía el deber de telonear a gigantes como Primal Scream y Air. Aunque ni sintió la presión, porque desde temprano buena parte del público se agolpó a su escenario para no perdérselo. Y claro, con la rudeza y preparación que eso implica y que quedó de manifiesto cuando, en uno de esos momentos dignos del músico, tiró su guitarra al público para que la terminaran haciendo pedazos.
Che Mac DeMarco tengo un cacho de tu guitarra pic.twitter.com/1t6aQhtEV6
— Pela (@TomiPelaez) 14 de noviembre de 2016
Desde su aparición y su primer cigarrillo, quedó claro por qué tantas venidas frecuentes: Porque se le quiere y porque la identificación en este lado del mundo con su figura y su discurso son claras. En otras palabras, es uno de "los nuestros", que canta sobre cosas que "nos pasan" y que hace cosas que cualquiera haría si tuviera la vida que él tiene.
Subió en brazos a su polola Kiki, le dijo a los fans en el escenario que haría un sideshow este miércoles y que si lo veían en la calle "no fueran tímidos", tiró la talla con su banda, se sacó las zapatillas y hasta intentó jugar con un cover de Limp Bizkit y hacerle una canción a su sonidista.
Pasa de todo en un show de Mac DeMarco y las posibilidades solo aumentan cuando se queda un par de días más en el país que lo acoge. Entre propuestas de matrimonio ahora que ganó Donald Trump, hasta quizás qué.
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