Se viene un libro imprescindible en nuestra biblioteca: “A Life in Parts”, la autobiografía de Bryan Cranston, el célebre actor que ha saltado de papeles entrañables y dulces como el papá Hal de "Malcolm in the Middle", al crudo Walter White de "Breaking Bad".
De hecho, una de las primeras cosas que nos cuenta el libro, que sale en estos días en Estados Unidos, era que el actor no era prioridad para el papel que lo volvió inmortal. Christian Slater y Matthew Broderick corrieron primero para ser este padre en apuros que se descubre a si mismo en la serie de AMC.
Tres años después del final, Cranston confiesa que todavía no se ha sacudido a Walter. "Walter está en mí y yo en Walter", dijo el actor en una entrevista para The Seattle Times. "Él me creó y yo lo creé", cuenta.
Su historia con el calvo profesor de la serie es parte importante del libro, en gran parte hecho en aviones, durante los viajes que ocupan la vida del actor. "Fue poco a poco como vino a mí", dice Cranston sobre el proceso de sus memorias. "Me imagino que habría enfrentado mucho a la pantalla en blanco si esto fuese una novela. En realidad, no fue difícil de abordar, porque se trataba de historias que conocía".
Cranston se dedicó a escribir historias individuales sobre su infancia. Su padre lo dejó cuando tenía 10 años mientras su madre era alcohólica. Él y su hermano pasaban el tiempo en la granja de sus abuelos, mientras aprendían a cortar las cabezas de los pollos, en un viaje triste y solitario que, en su adultez, se expresó en la separación con su primera esposa y un romance enfermo donde incluso se imaginó azotando la cabeza de su polola contra la pared.
"Me estaba perdiendo a mí mismo y me sentí fuera de control", recordó Cranston. "Esa pequeña mujer tenía tanto control sobre mí, y al principio me daba vergüenza admitirlo. Soy un hombre adulto; Soy fuerte. Y tuve que salir de mi propio ego", cuenta.
La preparación para ser Walter White fue una locura. "Me esfuerzo hasta lo imposible por hacer mis personajes lo más honestos posibles" dijo, remarcando que con Walter "creo que estamos íntimamente ligados". Walter le enseñó lo que era ser masivo, y le permitió experimentar y expresar "toda una gama de emociones". Por eso mismo, cree en que debe ser alguien que además de entregar lo que mejor sabe hacer, inspire a los que vienen.
"He sido un actor profesional desde hace 37 años, es parte de la estructura de lo que soy. No sé nada acerca de la actuación que no pueda compartir. Y yo quiero ayudar a la próxima generación. Todos tenemos un largo y muy solitario camino, y podría ser una gran tienda de campaña donde todos se apoyan mutuamente ".
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Three years after 'Breaking Bad,' Bryan Cranston still hasn't shaken Walter White