Las sentadillas son tan intensas que no sólo quemas calorías al momento de hacerlas, sino que el efecto sigue el resto del día. No menor, ayuda a mejorar la postura... Algo que de vez en cuando nos falla al estar todo el día mal sentados en el escritorio.
También mejora la circulación de la sangre, y claro, tiene como una de sus consecuencias positivas que ayuda a tonificar piernas y glúteos.