Por si no lo recuerdan, el #CelebGate fue ese bullado caso de filtración de fotografías íntimas donde una de las afectadas fue nada menos que Jennifer Lawrence.
Ahora el responsable ya tiene nombre: Se llama Ryan Collins y fue descubierto tras una ardua investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos. Arriesga entre 18 meses y cinco años de prisión.
Si bien Collins reconoce los delitos de hackeo cibernético y acceso ilícito a un ordenador para obtener los datos, la fiscalía lo exculpó del delito de difusión de las imágenes, que se atribuyen a terceros.