Como te estuvimos contando todo el fin de semana en Tenneessee, Black Jack estuvo cubriendo el festival. Y pasaron muchas cosas, como ésta.
La cosa fue así. El día después de que sus travesuras en Bonnaroo, él, Zach Galifianakis, y un productor de cine se detuvieron en el Tupelo Honey Cafe a unas 70 millas de distancia. Fue allí cuando mientras conversaba de su experiencia ordenó un sandwich, huevos frito, café y un jugo de naranja a la camarera Abby Swartz, además de regalarle su pulsera de acceso completo para Bonnaroo.
"Toma esta pulsera y anda a Bonnaroo. Esta te llevará a cualquier lugar que necesites ir", le dijo Hamm a la chica, la cual, ni tonta ni perezosa le dijo que lo amaba y terminando su turno, viajó al festival.
Allí le sacó fotos a Florence Welch y vio en un sector privilegiado el show de BillyJoel además de pasarlo estupendamente.