En un tremendo atado se metió Beyoncé y su marido Jay-Z, ya que supuestamente transgredieron la ley que les impide viajar a Cuba y hacer allí transacciones turísticas, puesto que con eso estarían "abalando y financiando" el gobierno de Fidel Castro en la Isla al haber viajado a celebrar su aniversario de matrimonio y no por "motivos educacionales"
Fue nada más ni nada menos que el congreso estadounidense el que dio a conocer esta información. La legisladora republicana, cubana y contraria al régimen castrista Ileana Ros-Lehtinen contó en una carta que "Entendemos que los viajeros en cuestión (Beyoncé y Jay-Z) viajaron a Cuba en el marco de un viaje de intercambio educacional organizado por un grupo autorizado por la OFAC (la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro, encargada de autorizar estas licencias) para patrocinar y organizar programas para promover el contacto persona a persona en Cuba".
Por eso pidieron información para saber sobre el "tipo de licencia que Beyoncé y Jay-Z recibieron, con qué propósito y quién aprobó dicho viaje".
"Si las actividades turísticas realizadas por Beyoncé y Jay-Z en Cuba son clasificadas como un viaje de intercambio educacional, entonces está claro que la administración Obama no es seria a la hora de denegarle al régimen de Castro un salvavidas económico que supone el turismo estadounidense", dijo la congresista. (El viaje fue una) "vacación de celebración de aniversario matrimonial que ni siquiera se disfrazó de programa cultural", criticó.
Veamos en qué termina este round político con Beyoncé entre medio.