Para un plazo de cuatro años está prevista la instalación de todos los equipos de la red de medición del Centro Sismológico Nacional, institución que será administrada por la Universidad de Chile, con el apoyo de la Oficina Nacional de Emergencias.
Con este aumento en los equipos, la idea es disminuir el tiempo en que se confirma la magnitud de un temblor. Actualmente, esto tarda cerca de cinco minutos y la meta es poder reducirlo a tres.